onsdag 11 Jul 2007, 23:55

Quizás algunos de los principales problemas que he tenido desde que tengo memoria ha sido mi gusto, haciendo un amplio recorrido por mis gustos cualquiera se puede dar cuenta que son atípicos, no comunes, no generales, no del montón.

Haciendo esa salvedad, hagamos referencia a mis gustos musicales. ¿Que ha pasado? Que es lo que no gusta de la música. Es que todo tiene que tener la condición trascendental en nuestras vidas como para que la música sea un apéndice del estilo de vida.

Pues…

BULL SHIT

La música para mi es aquella peculiaridad de sonidos que rompen el silencio, no me da una filosofía de vida y creo que por ende no me va a afectar de donde, con que objetivo venga la música. Es decir yo escucho lo que me gusta. Ahora esto no quiere decir que se demerite a algún artista. Nada de eso. Todos los artistas son tan capaces de hacer lo que quieran, lo que vale en este momento más que la forma y el método es el producto.

Si el producto me gusta, no necesariamente signifique que me guste el productor. Nada de eso. Cuando en la música me gusta el producto mas no quien la produce, lo hemos denominado “placer culposo”. Pero esa no es la generalidad. El enfoque de mi gusto por la música no se centra ni en el culto ni en la convicción. Eso es restringirse a cuanto nuevo ritmo surge o aparece, eso es entrar a escuchar la música con un prejuicio.

Ejemplo: porque el niño viene de una boy band pierde validez su producto. No para nada, es un producto es mas es mas valedero, porque tiene la elaboración de mucha mas gente que la que puede hacer un canta-autor. Claro mas trabajo el de una persona que el de muchas, pero lo que llega a mi oído finalmente es el producto.

Por eso para mi es tan valida una canción de RBD que una de Sinatra, el merchandaising detrás de la banda ya es otra cosa (oh pues me van a decir que nos les gusta Kiss por eso), pero a mi como “receptor” musical lo que me interesa es lo que le de gusto a mi oído, muchas veces no tiene que ser una canción solo un corta combinación de acordes hace que me termine gustando una canción.

Lo siento mucho es mi gusto, pero pues el hecho que me guste a mi “x” canción no me hace menos que nadie, y pues desgraciadamente, me vale CULO sus refinados gustos musicales, que terminan no aceptando lo comercial, por culto. ¿Culto?, que es esa vaina, más que una serie de prejuicios que osan decir aquellos que quieren libertad… grave paradoja.

Así que pues dejen la pendejada, es mas los invito a escuchar aquella música que se han restringido de oír solo por el hecho de ser comercial o por ir enfocada a un mercado determinado.

A los que ya lo hicieron y no les gustó por “x” o “y” motivo, los invito a compartir con tolerancia lo gustos de los demás, con respecto de la misma manera que lo esperaran de mi lado.