måndag 31 Aug 2009, 17:39
Desde la reunión de Megadeth en el 2004, todos sus álbumes han sido "el mejor desde Rust In Peace", y han sido considerados como el regreso de Megadeth a sus raíces. No parece tener mucho sentido, ya que cualquiera que los haya escuchado es capaz de darse cuenta de que las raíces de speed metal de Megadeth no están por ninguna parte en "The System Has Failed" o "United Abominations". Eso no quita que sean buenos álbumes, pero no parecen hechos por la misma banda que parió obras maestras como RIP o Peace Sells. La gente esperaba el verdadero regreso de Megadave, y entonces fue anunciado que Chris Broderick se unía a la banda y que entraban en el estudio.
Las esperanzas aumentaron de nuevo, y a mediados de Julio, una canción del disco, Head Crusher, fue puesta en internet para descargarse. Era aplastante. Rápida, agresiva, con letra mórbida y un impresionante solo de Chris Broderick al final; una perfecta lección de speed metal. Ya no se trataba de esperanzas; a nadie le quedaba duda de que esta vez sí iban a sacar una obra maestra sólo comparable a Rust In Peace.
El verano siguió su curso y más canciones salieron a internet, algunas legalmente y otras se filtraron, hasta llegar a un total de 5. Y todas eran la hostia. Con la mitad del disco fuera, el 15 de Septiembre parecía increíblemente lejano, y entonces ocurrió algo sorprendente (o quizá no tanto): el álbum entero se filtro a internet hoy mismo, 31 de Agosto. Me ahorraré la charla sobre la emoción y sin más preámbulos pasaré describir el álbum y a contar mis opiniones.
Dialectic Chaos empieza con un riff más bien extraño, pero éste pronto da paso a los solos, largos y técnicos, propios de un guitarrista que tuvo el honor de formar parte de Nevermore. Y entonces…oh, Dios. This Day We Fight! no parece gran cosa al principio, pero al cabo de medio minuto estás sacudiendo la cabeza como un maníaco, thrasheando y liándote a hostias con tu habitación. Entonces sí tienes un respiro, porque 44 Minutes es más lenta y melódica, pero igualmente buena. Parece más bien salida de un disco moderno de Megadeth; de hecho todo el álbum es una mezcla del estilo clásico con el reciente. Hay otros temas como 1,320' que parecen salir casi de Killing is my Business, y otros como Bite The Hand o How The Story Ends que dan la impresión de ser canciones que quedaron de las sesiones de System y UA, y realmente no suenan muy inspiradas.
Como ya se ha mencionado, las partes instrumentales son impresionantes; Bodies destaca especialmente. La canción que da nombre al álbum, Endgame, es épica y la más compleja del disco, y el riff que empieza en 4:40 es uno de los mejores de toda la discografía de Megadeth.
Pero entonces The Hardest Part of Letting Go...Sealed With a Kiss empieza, y la primera reacción de alguien que está escuchando un álbum de metal es sentirse horrorizado. ¿Es esto el Nothing Else Matters de Megadeth? ¿Es el fin? No necesariamente. Más adelante empieza una parte más dura y al final la cancion resulta ser bastante buena en general. El único punto negativo es la voz de Dave; no sabe cantar de modo melódico y romántico. Pero eh, puntos por intentarlo.
En general Endgame es bueno, pero le falta algo importante: velocidad. This Day We Fight y Head Crusher son las únicas canciones rápidas de principio a fin (o casi). No puedo evitar tener la impresión de que The Right To Go Insane o Bite The Hand habrían salido muy beneficiadas si Shawn Drover hubiese tocado más rápido. Pero lo hecho, hecho está, y aún sin esa velocidad extra sigue siendo un gran disco. ¿Tan bueno como Rust In Peace? No. O eso parece ahora, pero Dios sabe que cuanto más se escucha un disco, más se aprecia. De momento, sé que el 15 de Septiembre voy a ir derecho a la tienda a comprarlo.
Larga vida a Megadeth y Metal Up Your Ass. \m/